Este invierno, sáltate los molestos dolores que suelen acompañar al frío. Toma nota de los consejos que te proponemos para evitar el desgaste del esmalte y la tensión mandibular que acompaña a las bajas temperaturas, para evitar patologías más complicadas relacionadas con la articulación temporomandibular o ATM.
Nuestros consejos:
Para empezar, vamos a tratar de evitar las patologías comunes de la temporada de frío para no padecer picos de fiebre y esos molestos momentos de tensión mandibular y dolores de cabeza: como siempre, una buena alimentación rica en vitaminas, nos ayudará a olvidarnos de muchos constipados.
Y, por supuesto, abrigarnos. Evitar grandes contrastes de temperatura entre nuestro cuerpo y la temperatura exterior. Es muy importante para evitar la sensación de frío que se acompaña con una gran tensión de músculos y nervios, así que, no olvides tu bufanda.
Vigila la temperatura en casa, oficina o lugares donde vas a pasar más tiempo. Tener puntos de calor cerca o utilizar mantas térmicas o eléctricas son una solución para no tener que subir demasiado el termostato.
Muévete. La inactividad de los músculos provoca que estén más débiles y contraídos, lo que hace que aumente el dolor. Una musculatura activa y fuerte está más preparada para las bajas temperaturas y cambios de presión, combatiendo los efectos del frío en todo el cuerpo y, sobre todo, en la articulación temporomandibular que provoca los molestos dolores de mandíbula.
Recuerda concertar una cita con nosotros para hacer una valoración general y ofrecerte los mejores consejos para mantener una salud dental de hierro. Nuestros expertos te aconsejarán sobre cómo cuidar tu salud ante las tensiones musculares y bucodentales.
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